Friday, June 07, 2013

ARQUETIPOS JUNGUIANOS




ARQUETIPOS JUNGUIANOS



Psicointegración 11/10/2012

Jorge Raúl Olguín




A través de la charla se comentan varios arquetipos junguianos analizándolos por medio de ejemplos y situaciones de la vida. Jung amplió el concepto de consciencia a inconsciente colectivo sugiriendo que este proviene de más allá del yo físico, a través del alma y que ha sido transmitido por religiones, filosofías, etc.


Jorge Olguín: Hay distintos tipos de arquetipos junguianos que yo los relaciono con roles de ego y uno de ellos es el niño eterno. El niño eterno es el eterno demandante, el que no se desprende de su madre. En la letra de los tangos la mayoría de los "guapos", de los tangueros de los años 30 y 40 del siglo XX, eran todos niños eternos: "Percanta que me amoraste en lo mejor de mi vida" (mujer que me dejaste en lo mejor de mi vida) -amurar es dejar, abandonar-. Me dejaste. O sea, ya está reclamando, tú me dejaste.


Otro tango dice: "Chorra, vos tu vieja y tu papá". Ella es una mujer que lo seduce y le saca todo. Chorra significa ladrona, le saca todo. Termina el tango diciendo: "Cómo me has dejado, que si en este momento se me arrima una mina (mujer) me pongo al lado del botón (policía) como diciendo "Cuídame, cuídame de la mujer".

O sea, que los guapos malevos, esos que andaban con facón (cuchillo), que le hacían el tajo en la cara al otro, eran todos niños eternos porque eran todos quejosos, demandantes y la percanta (vividora) los dejaba.


El mismo DiscepolínDiscépolo, que es uno que tiene las mejores letras de tango- que dice "Siglo XX cambalache, problemático y febril, el que no llora no mama y el que no afana es un gil" (el que no roba es un gilipollas) no deja de ser también un niño eterno porque todos reclaman.


Hay un tango escrito por Discépolo que dice "Cuando la suerte que es grela" (grela se le llama a la mujer, o sea, en qué concepto tenía el guapo a la mujer, como que siempre la mujer era la que lo abandonaba, lo dejaba), "Cuando la suerte que es grela, fallando, fallando te largue parao. Cuando estés bien en la vía (en la vía es completamente desnudo, despojado de todo) sin rumbo, desesperao, cuando no tengas ni fe ni yerba de ayer secándose al sol". O sea, que era tan pobre que la yerba que había consumido tomando el mate en lugar de tirarla porque ya estaba usada la ponía a secar para usarla al día siguiente. "Te acordarás de este otario (otario es tonto) que un día cansado se puso a ladrar (a gritar por impotencia), verás que todo es mentira, verás que nada es amor, que al mundo nada le importa, yira, yira...". Yira significa girar, andar, o sea, andar por los caminos. Luego la palabra yira se adaptó en Buenos Aires para la mujer de la calle.


Hay un tango de una mujer que lo abandona y vuelve y le dice: "Me alegra que hayas vuelto después de casi un año, con ese vestidito que yo te regalé, tus lujos, tus alhajas me hubieran hecho daño, qué bien que te has portado volviendo como ayer". La tipa se fue con un tipo de París a los mejores cabarets pero cuando se le acabó el combustible volvió al cotorro (cotorro o bulín se le llama a la pieza del guapo que tiene un camastro, una mesita y dos o tres cositas más, un par de pantalones, el sombrero, el lengue, el fungi, el echarpe o bufanda y nada más) y él la aceptaba de vuelta porque no le importaba lo que ella había hecho pero lo importante era que volviera simple como antes. Bueno eso es el famoso niño eterno.


El héroe solar -que es el otro arquetipo- es el que no demanda, el que rescata a la dama, el Sir Lancelot, el que vence al dragón. Está el rol, arquetipo de madre, es la pareja demandante.


El profesor Antonio comentaba que fue a un programa de radio, en Mendoza, Argentina -Mendoza está en la mitad del país-. Quince o veinte minutos antes de comenzar el programa al aire el hombre habló con él. Dice:

-¿Y su señora?

El de la radio le dijo: -No vino. ¿Le puedo contar, profesor?

-Sí.

-Yo tengo una secretaria que es como mi mano derecha y me tiene los papeles, me tiene la programación, me tiene todo. ¡Ojo, nada que ver, eh! O sea, es como si fuera una hermana, nada que ver. Nosotros estamos a una hora de coche de Mendoza y cuando viajábamos mi esposa me dice:

-A qué quieres que vaya. Yo no pienso ir si tienes a la otra que te hace todo.

-Pero mi amor, nada que ver. Ella es mi secretaria.

-¡Je! Yo para qué voy a ir, a estar de más.


Es el arquetipo de madre demandante, que es tóxico porque la pareja tóxica es la que no te permite crecer y te puede llegar a tirar para abajo. Si no te tira hacia abajo porque eres muy fuerte, porque eres héroe solar te atrasa. Porque tú te debes a toda la humanidad y que una pareja, por supuestos celos de con quién te vas a ver en aquel país o con quién te vas a ver en aquella provincia o mira cómo te mira esa chica o que te diga esto o que te diga aquello y te esté mirando... pero no se le puede prohibir que te miren.


La cuestión es que el hombre de la radio llegó al programa con una escala tonal bajísima. El programa lo sacó adelante el Doctor Antonio porque el locutor estaba pinchado, desinflado y eso fue responsabilidad. Y en este caso sí digo culpa porque es a propósito, culpa de la esposa, porque supuestamente tenía unos celos incoherentes de la otra, que no era la otra, era una empleada. Bueno, ese es rol arquetipo de la madre, que no tiene que ver con mamá sino la pareja demandante, la pareja que no te deja crecer. Y ese es uno de los roles más difíciles de revertir porque es un amor inseguro de la persona demandante, es un amor inseguro donde te celan por todo. O si tú de repente haces una pequeña broma con alguien, ¿esa broma es una infidelidad? ¡No, no es una infidelidad! Esa broma es una infidelidad porque seguro que si la persona te ve le cortas la cabeza. No... no.

El amor demandante de arquetipo materno no deja crecer al héroe solar, lo mantiene prisionero y no importa si él pierde, pierden todos porque la persona queda enclaustrada. Es como si yo tuviera la mejor enciclopedia británica guardada en una caja que se vaya pudriendo, una cosa así.


El arquetipo bueno es el arquetipo de ama, el ama de casa. El ama de casa que está tan mal visto: "Es una ama de casa, no trabaja". Primero que la palabra ama viene de amo, de dueño, es la dueña de la casa, es la que hace las cosas. Obviamente que el sentido de ama de casa se ha perdido porque desde décadas antes del siglo XX y todo lo que va del siglo XXI y lo que seguirá la mujer trabaja a la par del varón; entonces es como que lo de ama de casa se ha perdido. Pero el ama de casa es la que apoya al héroe solar, sigue siendo la dama. El héroe solar no puede desarrollarse si la dama no lo habilita. Habilitar no significa que lo empuje a que haga las cosas, habilitar significa como que lo apoya, claro, para que el héroe solar vaya. ¿Quién es un héroe solar? Ulises de Ítaca.


Hay tangueros o guapos. El propio Martín Fierro, que fue traducido a infinidad de idiomas, el Martín Fierro argentino, "Dejó a su china". Se le decía china porque la mayoría de los habitantes de América son descendientes de indígenas y tienen los ojos achinados, por eso le llamaban china a la mujer. "Dejó a la china en la tapera (tapera son esos ranchos de techo de paja y no más) sin nada cuando él se fue a pelear a los fortines. Le importa nada la china". Eso es un niño eterno.


Ulises, cuando deja a Penélope, primero que la deja en el reino cobrando todos los impuestos, con todos los soldados protegiéndola como una reina que era. Es verdad que se fue a la aventura. Cuando él vuelve, como habían pasado años, todos los reyes vecinos la estaban cortejando para estar con Penélope. Viene Ulises y al lanzarse a flechazos con la espada los mata a todos menos a uno que le dice: "Tú quedas vivo para dar testimonio de que los he matado a todos y que nadie se meta acá con nosotros porque yo soy Ulises de Ítaca y he vuelto". Eso es un héroe solar y Penélope era la dama.


En medio de la charla yo hablé con el doctor Antonio y le decía:

-Hay una cosa que después deseo hablar contigo -le dije-.

Y cuando hicimos un "break" fuimos a otra habitación y en la otra habitación le dije:

-Extraño un arquetipo, un arquetipo que nunca tuve.

Sin decirlo -pero era sabido, éramos héroes solares- le digo:

-Extraño a la figura que está por encima del héroe solar, que es la del Anciano Sabio, porque nunca tuve una figura paterna que me demuestre la directiva o que me enseñe el camino de la vida, lo tuve que aprender yo solo por mi cuenta.

Bueno, el doctor Antonio me dijo lo mismo. Él perdió a su padre siendo muy chico, muy joven y tampoco tuvo ese anciano sabio.

Y en este momento yo no soy anciano sabio para nada, yo, Jorge porque no importa la edad que tenga. Creo que el anciano sabio es una persona retirada que enseña a los demás y cuando uno está en actividad sigue siendo héroe solar. Por lo menos es el guante que a mí me calza, no me calza la figura de anciano sabio, me calza la figura de héroe solar, que el héroe solar también puede ser sabio.


Invitado: Uno es activo y el otro no es tan inactivo.


Jorge: Digamos como que el anciano sabio tuvo que ser un héroe solar, deja de ser héroe solar cuando se retira. Cuando Ulises vuelve a Ítaca y queda en su trono ya no lucha más pero no pierde el arquetipo de héroe solar, por lo menos por muchísimos años. Y muchos de nosotros, a veces, extrañamos la figura del anciano sabio. Salvo en casos excepcionales que la teoría Junguiana no admite o por lo menos no lo dice abiertamente. Hay casos donde el héroe solar puede asumir los dos arquetipos, de héroe solar y de anciano sabio, sería un anciano sabio en actividad.


Pero aquí en el plano físico no hay nada que lo pueda perjudicar porque no se va a llevar mal con otro héroe solar, pueden acordar o pueden combatir como combatían los caballeros en la época del Rey Arturo con la lanza grande y los dos a caballo y uno desmontaba al otro, o con duelo de espadas, pero el derrotado seguía siendo héroe solar, no perdía la dignidad, podía perder la cabeza pero no la dignidad. Seguía siendo héroe solar muerto pero héroe solar al fin. Entonces el héroe solar nunca podía quitarle el título de héroe solar a otro, podía vencerlo en batalla pero no quitarle la dignidad. Solamente el rol del arquetipo de madre puede tirar abajo al héroe solar. Cuando hablamos de madre acordamos que estamos hablando de la dama que se transforma, en lugar de dama se transforma en madre que lo trata de retener para ella y no le permite ir a la batalla. Es el único arquetipo riesgoso que pone en peligro la campaña de Ulises, si Penélope hubiera sido celosa.


Acordamos que los celos desequilibrados es signo de baja estima. No nos vayamos a la falsa suficiencia: "Yo me considero buen hombre. Que mi pareja se vaya de vacaciones a un crucero... Total, yo me siento seguro". No, eso me parece muy tonto porque tentaciones hay en todos lados. Siempre voto por el equilibrio, o sea, ni demandante ni dejado. Hay un refrán que se comparte entre España y Argentina, que es "el ojo del amo engorda el ganado". Eso es para el trabajo: "Si yo estoy van a trabajar mejor". Pero también sirve en las relaciones, digamos, "yo cuido mi hacienda, yo cuido mi quintita", que en realidad no tendría que ser así porque se basa en la confianza mutua pero tiene que ver también con los caracteres, con la forma de ser, cómo es cada uno y acordar las cosas pero a veces el arquetipo Junguiano de madre no deja al héroe solar expresarse en su totalidad, lo tiene maniatado, jalado y pierden todos, como cuando en la ruleta sale el cero, viene con el tipo secador y barre todas las fichas. Y eso es.